YUKÓN
50 x 100 cm / óleo sobre lienzo
Un camino muy estrecho, apenas lo suficientemente ancho para dar un solo paso, serpentea a través de la espesura de la incertidumbre y la duda. Su dirección parece clara, pero su destino está oculto en la niebla de lo desconocido. Pero quienes miran el resplandor en el horizonte pronto ven la verdad detrás de esta ilusión de confinamiento.. Con cada paso cuidadoso que das, la verdad se revela como el capullo de una flor delicada. Se aprende que no es la amplitud del camino lo que determina el progreso, sino la profundidad de la fe y la determinación del corazón.